Los humanos nos encontramos en BUSQUEDA por la vida, unos de libertad, responsabilidad y solidaridad; estos se preocupan por los derechos humanos, por el progreso de la humanidad, por las libertades individuales, por la paz mundial, por la salud de la tierra y la vida en el cosmos que tanto cuidado necesita, las soluciones a los problemas inmensos que sufrimos todos en esta tierra. Dedican sus esfuerzos para sacar a la humanidad de la ignorancia, de la postración materialista y de los apegos lastimosos para que sean capaces de dejar las alienaciones.
Otros buscan placer y huir del dolor, y ellos sufren por causa de esas fugas de la realidad que tanto desgastan. Porque los que se obsesionan por el éxito, la felicidad, la belleza, el amor, el dinero, las comodidades, el poder, el consumo, el prestigio, la aprobación y todos los alrededores de una civilización del CONSUMO, todos los que persiguen placeres y solo comodidades viven estresados y llenos de sed interna y exterior.
Las roturas por dentro son demasiado pesadas como para subsistir con tranquilidad y viven despedazados y en ruinas lamentables. Como expresa Royal Rimpoché, aquel monje tibetano; “que los seres humanos pareciera que nos arrastramos por la vida bregando a calmar la SED, pero recibimos un vaso con agua de mar constantemente”.
Todos los APEGOS al deseo, NOS VUELVEN EGOISTAS, de muchas formas apresan y nos esclavizan. Incluso ni nos damos cuenta, pero generan unas fuerzas que AFERRAN, quitando la libertad y la salud mental. Porque los deseos por controlar, son en el fondo ansias por acaparar al otro. Hay un susto descomunal para que el otro siga siendo un OBJETO y no vaya a cambiar los sentimientos, nos duelen sus comportamientos, sus reacciones y no perdonamos, ni los olvidos ni los silencios.
Creemos que somos felices si compramos, si viajamos, si adquirimos y estudiamos…todo esto que de muchas maneras son asomos de los DESEOS, pululando a toda hora. Pero no podemos quitar los DESEOS.
Erick Kornfield nos alista para describir que hay deseos saludables pero otros enfermizos. Todos los que crean sufrimiento e insatisfacción son dañinos. Los que nos desbocan en ansiedades, en egocentrismo, en avaricia, en miedos, no son humanos. Los DESEOS, que nos alistan con la SABIDURIA, como actitud positiva, que jalonan nuestras pulsiones de forma ordenada, humana, realizadora y nos invitan al desprendimiento, son saludables y provechosas.
Con todo, hay que tener en cuenta que nada ni nadie nos satisface, vivimos con sed in-llenable, nada es suficiente. Somos herederos de una civilización en la que todos los inventos, creaciones, descubrimientos y la cadena del progreso, no nos satisface. Nadie se llena con nada, vivimos insatisfechos emocionalmente en todos los aspectos.
2.
Cuando un concepto es profundo, es esencial, es difícil de definir, es porque nos supera el entendimiento y la comprensión; esto significa que no es fácil de asimilar. Que se necesita el tiempo, la conciencia y el vencimiento personal para adquirir unos comportamientos nuevos.
Deseo tiene al menos dos tendencias: el uno es pulsional que podemos definir como anhelo, sueño por cumplir, meta-objetivo por lograr. Y el otro es EPITHIMIA, tendencia libidinal, que es una fuerza pasional que nos empuja hacia afuera, o hacia adentro. Esta fuerza que es la LIBIDO, nos empuja a conseguir un deseo carnal de forma concreta, que excite los sentidos, que despliegue las dinámicas sexo-genitales y afectivo-sensoriales que dan salida a las emociones, curiosidades, imágenes, ideas, recuerdos, vivencias que hemos acumulado a lo largo de la vida. Pero hay un concepto serio de dificultad no solo emocional sino lógica que nos acosa en la culpa: es la idea- sentimiento de CONCUPISCENCIA.
Que tiene que ver con pecado, con prohibición, con castigo, con algo mal desarrollado que nos inhibe. Es en el fondo el “deseo” por transgredir, por llevar la contraria, por darle rienda suelta la curiosidad que nos empuja hacia la maldad. El deseo mal enfocado.
Es el DESEO, el que hace brotar el “me gustas”,” te amo”, “te quiero”, “te deseo”, “me gustas mucho”, “contigo me siento bien” términos todos que narran lo PLACENTERO, pero al mismo tiempo es huir del dolor, del vacío, del desamor. De modo que los deseos son tramposos; crean ambos movimientos. Alcanzar el placer y huir del dolor-vacío.
Nos podríamos aproximar a otra forma de DESEO que es aceptar que somos unos seres insatisfechos, in-llenables e invadidos de deseos muchas veces tan sin forma, que ni siquiera sabemos lo que nos FALTA. Ni de qué tenemos ganas.
3.
Somos a partir de una SEPARACION. Fuimos gestados en un útero materno, allí experimentamos una unión perfecta madre-hijo.
Pero, aunque llena la gestación de plenitud aparente, tuvimos dolores emocionales que nos marcaron.
Ya afuera en el camino de la vida, experimentamos esta frase dolorosa pero real: “Yo no soy TU. Me eres en medida infranqueable distante, eres desconocido, me eres extraño y siento que somos diferentes.” Como muy bien expresa Margareth Mahler.
Claro que algunos rasgos “narcisistas y conquistadores” nos hacen exclamar: “somos tan iguales, todo coincide, me adivinas todo, nos parecemos mucho, todo en la vida nos une con un entrañable sentimiento de ser-como-mellizos”. Muchas veces es la fuerza de la seducción la que no empuja a creer que no solo el otro es “objeto amoroso”, sino que además es un alguien que suple los faltantes.
Después caerán en cuenta que era mentira emocional y manipuladora. La realidad nos mostrará qué lejos estábamos de la “cercanía y gemelidad. Que la sintonía es difícil de alcanzar a no ser que haya esfuerzos bastante generosos en ambos.
Esto supone aceptar que el narcisismo está herido y debemos asumirlo. Que nos falta mucha espiritualidad, trascendencia, fe y esperanza en otra escala evolutiva.
Porque es necesario recorrer una serie de etapas evolutivas que nos generan el crecimiento apropiado:
Hay que estar dispuestos a avanzar por unos pasos desde el 1 hacia el 6.
1- Simbiosis uterina, ausente. (lo que nos prepara para vivir en un mundo desconocido en la fe). Avanzar a tientas y solos.
2- Nacimiento a un mundo desconocido.
3- Individuación incómoda y dependiente.
4- Deseo por la fusión con otros que nos rodean.
5- “Autismo” que lucha contra la “vinculación”.
6- Asumir la separación básica de la madre, que nos hará fuertes para enfrentar sucesos, tiempos, experiencias, para poder aceptar mas tarde la lucha entre DESEOS y VACIOS. Que es en el fondo prepararnos para manejar la SEPARATIDAD, tan espantosa pero real. Una separatidad sin “remedios “caseros ni importados”. ¡Que podamos enumerar todos los deseos incumplidos!
Sabiendo que la vida transcurre entre Deseos, normas y prohibiciones-con muchos faltantes.
Todos tenemos una ilusión, de repetir el ESTADO ORIGINAL, cuando vivíamos en el útero materno y no nos hacía falta nada. Pero ahora al experimentar tanto vacío, carencia y faltantes, lo deseamos llenar con otros que acaparamos para que nos suplan las necesidades de ser completados o en efecto si no son personas, recurrir a cosas-objetos, a sustancias, a substitutos de cualquier índole con tal de sentir que llenamos los vacíos. La sed por ser completados es infernal y “descompensadora”.
4.
La antropología sobre todo la europea, creyó que hubo en el antaño remoto, tribus felices, clanes perfectos, donde la vida sin normas ni prohibiciones, fue paradisíaca. (los hipees y los kibutz creen que pueden lograr esa emancipación total). Parece que la vida tiene sueños, pero no son cumplidos, posee posibilidades, pero no sin todos los logros. Lo permitido tiene límites.
Estamos enclavados entre los deseos, las normas y las prohibiciones. Es demasiado curioso que la corporeidad incluye unas normas prohibitivas que nos marcan unos límites. La sexualidad lleva desde su interior unos rasgos de rabia-agresividad-pudor-negación. Lo sexo-genital posee unas barreras infranqueables y abismos por llenar, que no lo completan simplemente los DESEOS, por mas que me acosen.
“Parece que el DESEO es hijo de la angustia y al mismo tiempo es madre-padre de la ilusión”. Cuando prima la ilusión llenada, se da un encuentro sexo-genital y afectivo-sensorial satisfactorio. Pero cuando brota la angustia, la derrota es total y derrumba en los egoísmos e incomunicaciones. Salta la agresividad en todos sus componentes. La pelea está marcada. La competitividad es un infierno.
Parece que los DESEOS, que tienen otros significados, cada uno los traduce a su manera y son demasiado sensibles: anhelos, afanes, ansias, ambiciones, ganas, caprichos, manipulaciones, apetencias, deseos de control, poder enardecido. Y al traducirlos diferente, cada uno se siente tumbado-engañado-estafado e incluso traicionado, sobre todo cuando descubre secretos al descubierto.
5.
La libido es mas constante en los hombres. En las mujeres como hay ciclos, es cambiante según las glándulas corporales. En el primer ciclo antes de la menstruación, los estrógenos ayudan a lubricar, mayor irrigación en vagina y clítoris, entumescencia mas firme y caliente. Durante el segundo momento del ciclo, en los días previos a la menstruación, bajan los niveles de emoción, hay cierto dolor, resequedad y baja en los deseos, aumenta la inapetencia, apatía sexo-genital e incluso cambios de humor.
Esto se debe a la progesterona que aparece para estos días, bajando la intensidad y aumentando el cansancio hormonal.
Como todos los organismos vivos, los humanos nos movemos en búsqueda de lo que nos falta, para llenar las carencias y vacíos.
Esa fuerza se llama el DESEO por la completez. Pero hay que tener cuidado porque muchas de esas pulsiones no son sanas, aunque aparentemente llenen carencias. Pero el apetito que le genera el movimiento, como no satisface, aumenta las ganas, no plenifica, aturde, es insaciable. Genera un movimiento continuo de no–satisfacción, que embrutece. Todo lo que nos recuerde que fuimos DESGAJADOS de nuestra madre dolerá, nos hará vivientes pero insatisfechos, buscadores de sensaciones y seres en permanente frustración de miles de formas que nos harán agresivos y manipuladores.
Por eso muchas veces al recordar todo lo perdido, a no olvidar los dolores pasados. La ley, la norma, la prohibición será un alambre de púas, que nos delimitará y separará de la tormenta de los deseos que nos acosan por dentro y nos desordenan por fuera.
De ahí que los deseos estén tan ligados a los contra-deseos. Vivir en constante tensión contra los ANTIDESEOS, en una lucha polar de vida y muerte, de dolor y desalojo, de odio y violencia, de desamor e insatisfacción. Allí nace el meollo, quizás de toda la fuente del conflicto, la competitividad y la culpa. Aquí se desarrollan todas las batallas de desear-luchar-sufrir- triunfar-desgastarnos y sucumbir…para volver a ilusionarnos mas tarde.
La historia psico-sexuada de cada uno, las vivencias históricas de los afectos recibidos, negados, castigados, inestables, abusados, reprimidos. Las dificultades en la comunicación sensorial con los demás, a quienes queremos, son toda una ruta de odisea emocional que no se cumple a satisfacción.
Donde hay sexualidad hay LEY. De modo que las fronteras entre dos seres humanos sexuados con todas sus experiencias históricas, están llamadas a crear unas barreras indisolubles que hay que respetar, porque solo conversando y dando gusto es que se ponen de acuerdo con la normatividad para que conjuguen los sentimientos amorosos del uno para con el otro, porque si no brota el egoísmo y las tensiones que arruinan el post-encuentro. Es necesario la comunicación adulta entre dos que se relacionan.
Donde hay cultura hay sociedad, por lo tanto, hay normas comportamentales para delimitar las conductas sexo-genitales. Nada está garantizado en las relaciones psico-sexuales y genitales entre las personas. Los cambios son profundos, de improviso. En cualquier día calmado, pueden encenderse las mas gigantes olas pasionales, y los edificios de las pulsiones y calores emocionales se pueden apagar de forma sin precedentes, ni motivos. Años de invierno se convierten en emociones intensas, calores pasionales se pueden apagar de forma insólita. Todo es cambiante en el mundo de los DESEOS.
Donde hay dos cuerpos humanos, hay lenguaje, hay comunicación. Por lo tanto, es necesario unas leyes de respeto y alteridad porque el UNO no es EL OTRO, son dos diferentes con capacidad de expresión personal frente al extraño. Y esa necesidad de comunicación es lo que ahonda los deseos, las fronteras bien demarcadas del uno para con el otro.
De ahí que la afectividad humana está compuesta desde el INCONSCIENTE, en las profundidades marinas de todos los seres humanos, y por eso mismo está expuesto al desamor, al conflicto, a las peleas y malos-entendidos, porque al salir a la superficie de estar juntos, pero con inconscientes complejos, salta la pelea-la tensión-el desamor. Gana el egoísmo y el deseo por castigar.
Es muy en el INCONSCIENTE, que nos enredamos en las motivaciones, miedos, ilusiones, fantasías, vergüenzas y desilusiones. Por eso al hacerlas manifiestas, cada uno se atrinchera en sus emociones la mayoría de las veces heridas. Y el problema del inconsciente es que no es claro, nos obliga a estarlo limpiando, a vivir en claridad emocional a toda hora, bajo el riesgo de errores y malas decisiones, porque nos gana la pulsión por el DESEO.
Hacerse ILUSIONES no es lo mismo que tener ilusiones, vivir desilusionado no es lo mismo que aceptar muchas desilusiones.
Será necesario toda una propuesta pedagógica seria, realista para formar y educar a los niños de hoy con unas capacidades adecuadas para resolver problemas, mas decidir, elegir y escoger, para aprender que una cosa es el deseo y otra la consecución de los fines con el esfuerzo porque si, y que en la vida lo importante es crecer en BONDAD.
Es muy fácil echarle la culpa a la sociedad, a las religiones, a la educación, a los frenos personales, a la ley, de nuestras represiones. Todo lo que tenga que ver con las emociones, las manifestaciones, las comunicaciones sexo-genitales entre humanos, mas las vivencias afectivo-sensoriales, están expuestas a roces, malos entendidos y egoísmos; porque los deseos no se cumplen y frustran demasiado a los humanos.
Cuenta una parábola específica para aplicar en estos momentos del documento: un hada se le apareció a una pareja que estaba en luna de miel, llevaba tres días de ajetreo por el escape de las emociones y ni siquiera habían bajado al comedor a alimentarse. El hada les prometió, al verlos tan contentos que pidieran 3 deseos. La mujer hambrienta olió un asado desde el comedor y fue sacando su inconsciente primario; que mi boca tenga un pedazo de carne y de inmediato su boca se convirtió en asado. El marido, con rabia por haber votado el primer milagro, se enfureció y le deseó un mal a la mujer, cosa que se convirtió en realidad, al ver la miseria en la que estaban, gastaron la tercera posibilidad, en volver al estado primario y quedaron con la insatisfacción que tenían al principio.
Nada nos llena, nadie satisface, vivimos reclamando, nos debatimos entre las quejas y reclamos, la insatisfacción es álgida, la sed inagotable, la enfermedad queda cerca, la neurosis acosa, la fragilidad mental se aproxima. Hay que aceptar el vacío y la carencia. Los deseos nunca se calman, ni los sueños se consiguen. Hay que recurrir a las fuerzas espirituales y trascendentes para sublimar los dolores, vacíos, carencias y frustraciones. Solo desde el dolor nos acercamos a ser humanos y transformados.
El filósofo Zubiri, expresa que “somos un animal de realidades, pero dispuestos a enfermar de ilusiones, de sueños rotos, de desilusiones vergonzosas y de desánimos tristes”.
Además, es necesario esculcar la SOMBRA, todos tenemos un habitante interior que, si no los manejamos bien, nos termina por asustar. Ese doctor Jekyll y ese Míster Heidi que son los personajes de la novela famosa de Stevenson, es una obra magistral para retratar nuestra personalidad que tiene zonas cada vez mas claras, pero con unos abismos secretos que nos asustan. Es necesario esculcarla, hacernos amigos de ella, asimilarla, aceptarla, sacarle jugo para detectarla. No dejarnos amedrentar.
La oración, meditación, reflexión, silencio son bocados muy importantes para detectar y saborear la SOMBRA.
Julio 15 de 2.018
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