Hubo un hombre extraordinario que ayudó a cambiar el mundo. Se inventó una serie de patentes que transformaron la industria en esta tierra. Organizó la cadena industrial para ir desarrollando el automóvil de forma paciente, ordenada y con precisión.
Fue el primer gran hombre que organizó en EQUIPO, el trabajo humano, el trabajo en SERIE. Para que no le copiaran el invento automotriz, a cada obrero le enseñó hacer un aspecto, una especialización. Lo concentró en un solo sitio de trabajo y ahí debía responder por un paso de la cadena, aprendió por repetición que ese aporte era fundamental y no se debía preocupar por el resto. Al final salía el carro andando de la bodega y eso era un éxito de todos. Pero nadie sabía cómo se ensamblaba todo el procedimiento.
Pagaba muy bien, los motivaba a toda hora, cada vez recibía mas obreros, aumentaba la producción, y les participaba que el producto lo podrían adquirir y eso hizo.
Este hombre visionario aportó para la humanidad el trabajo en EQUIPO y conjuntó fuerzas obreras para un fin: elaborar el T2.
Ford, fue desarrollando un sueño prodigioso y a medida que el ensamble salía mas creaba, mas genial se volvía su cerebro, mas autoestima le crecía y se convirtió en un hombre EXITOSO.
Nació el 30 de julio de 1.863 en un pueblo de Michigan, cerca de Detroit en una granja, cuando su madre muere a los 12 años, se dedica a la fábrica de coches, para la que tenía ojos intuitivos.
Tenía en esta frase un slogan muy personal: “el fracaso es la oportunidad que te da la vida para comenzar de nuevo con mas inteligencia”.
Vivía motivado y motivando a sus empleados a toda hora: él decía que ahí estaba la clave de la industria. Era un ejecutivo lleno de emoción por vivir y disfrutaba lo que hacía. Se fue haciendo ingeniero mecánico con la vida.
La otra frase que fue su vida: “vivir preparándose es el secreto del éxito”. Siempre iba adelantado, atento, un metro después iban los otros. “El que se mantiene aprendiendo, se mantiene joven”. Todo este caudal de frases lo mantenían exitoso y alerta de vivir ganando.
Creó para las fábricas unos procedimientos extraordinarios y unos aportes sensacionales: producir en serie, ganar tiempos, y bajar los costos. Esa fue como el secreto de su empresa: el coche va a transformar la tierra. Impulsó las autopistas, creó los parqueaderos, nacieron los almacenes de repuestos y talleres. Todo el mercadeo en torno a los carros. Creció la industria automotriz. Se diversificó por todos los países unos productores y otros compradores. Hoy tenemos la industria del automóvil y carga, debido a semejante invento creador.
Después de este impase con el VIRUS, vendrán nuevos albores para la humanidad. Eso esperamos. Hay que esperar de la vida: un cambio en el ambiente que traducirá otras transformaciones.
Marzo 21 de 2.020
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