Nacemos de dos seres sexuados que se comunican de varias maneras y nos dan la vida.
La madre al criar una hija produce un ovulo redondo que recibe un espermatozoide X, genera una femenina. X+X= niña, femenina.
La madre cuando recibe un espermatozoide Y, genera al juntarlo con su ovulo X, un niño y en el vientre materno tiene que someterse a un cambio corporal debido a una transformación que hace el cerebro. El esperma Y, obliga a unos cambios fundamentales, definitivos para inclinar la condición sexuada al masculino. X+Y= niño, masculino.
Una vez que nacemos, comienza la estructuración psico-sexuada de la formación interna y que nos ayudará para ser exógenos, vivir el mundo externo.
Nos rodean unas figuras parentales masculinas, femeninas de diversas edades, condiciones, cercanías y lejanías con energías diferentes.
El clan familiar nos pone en un clima endógeno, pero nos enseña a aspirar hacia lo EXOGENO, hacia afuera.
Esas figuras nos ayudarán a ensamblar 5 etapas de desarrollo:
1- ORAL= desde el nacimiento hasta el primer año. Descubrir el placer en la boca, labios, encías, lengua, paladar y desplegar el gusto.
2- ANAL= desde 1 año hasta los 3. El control de esfínteres, la educación de la parte interna y exterior en sus manifestaciones de control, aseo y disciplina.
3- FALICO= descubrir las zonas erógenas, eróticas y exóticas. Visualizar el cuerpo y las diferencias con los otros. Ensayar placeres corporales con satisfacción. Explorar zonas de intenso placer.
4- LATENCIA= el compartir sexuadamente en comunidad. Aprender a estar juntos, convivencias y recibir-dar-compartir-gozar y sufrir. Vinculación y aislamiento.
5- GENITALIDAD= prepararse para aprender a conquistar, a relacionarse, a abrirse a la orilla sexuada de otros. Estar dispuesto a preparar salir de casa y organizar la endogamia y exogamia. Para salir de casa y dejar a los padres por un bien mayor social de la humanidad, cada uno aportando su sacrificio, sueños, cualidades, emociones y capacidad de resolver problemas.
2.
La tribu o el clan familiar rodea al recién nacido cualquiera sea la organización y la conformación. Allí en medio de su grupo familiar, cada niño va siendo sujeto de captación de dos polaridades: Descubre todas las Promesas, Placeres, Presencias, Imágenes positivas.
Y en la otra orilla están las imágenes de huir de la realidad, el abandono, los refugios en el mundo hostil, los miedos, las rebeldías, la agresividad y los dolores, los dis-placeres, las imágenes negativas.
Desde muy rápido los clanes descubrieron que los deseos y las prohibiciones van juntas. Por lo tanto, serán dos pedales para manejar los impulsos y la educación de todo sujeto que llega al clan. Son dos llaves maestras para la formación de niños, y así fortalecer la cultura social de la tribu, aunque sea urbana.
Esto se debe a que todo niño descubre en su mamá un objeto de deseo y en su papá un sujeto de identidad. La niña, descubre en su padre un objeto de deseo y en su madre un sujeto de identidad.
Estas dos dinámicas pueden tergiversarse y volverse opacas, generando una confusión de sentimientos, y una cadena de agresiones verbales o físicas. Síntoma que las relaciones son pesadas y debe sanar el hijo sobre todo y reconocer 4 aspectos:
Respeto. Admiración. Jerarquía y Agradecimiento. NO sanar es causa de miles de problemas.
Este camino es azaroso, se construye en medio de un triángulo complejo: Privaciones, frustraciones y prohibiciones. Pero manejados por la pulsión del PLACER.
La LIBIDO es toda la energía sexuada con la pulsión hacia adentro y hacia afuera. La endogamia empuja hacia sí mismo. La exogamia es la fuerza hacia afuera.
Todo esto es básico para organizar la lucha interna entre placer y displacer, amor y desamor, apego y desapego. Aguantar y perdón.
Es en medio del clan familiar que descubrimos 4 aspectos:
a- Autoridad.
b- Ley.
c- Tótem.
d- Protección.
Esto es sacado de 4 imágenes que copiamos del clan familiar:
1- Los modelos de identificación.
2- Que hay objetos y sujetos afectivos.
3- Que todo niño es protegido, auxiliado. (y castigado).
4- Pero que hay rivalidades.
Muy necesario para poder aprehender este magnífico triángulo que es necesario para forjar la realidad: padre real, padre simbólico, y padre imaginario.
El girasol es todo el símbolo de las angiospermas, tan necesarias para haber nacido. Un milagro de la naturaleza que comporta el núcleo o vientre, o útero acogedor para transformar la vida y los pétalos que protegen la vida infantil. Exogamia hacia afuera, y endogamia que entra al interior.
Padre es quien deposita en el núcleo su esperma para buscar el óvulo. Es quien RECONOCE al hijo, quien se inscribe en su memoria afectiva, respetuosa, cercana con los detalles y la educación. Quien fecunda y desea a nuestra madre. Quien PROTEGE.
Se matricula con los detalles de ternura para contaminar en el hijo la capacidad de recibir, dar y compartir.
Con un ángulo importantísimo y es descubrir que la madre es querida, respetada y fortalece el trabajo en equipo entre los dos progenitores. Un padre apoya, acompaña, anima, estimula, premia, fortalece, hace presencia. Brinda la seguridad autonómica.
3.
La intuición, la sospecha del gran maestro de la psicología Sigmund Freud sobre los edipos y electras, en la formación de los niños, talvez no lo pudo demostrar, incluso fueron observaciones bastante pobres y sesgadas. No tuvo tiempo de investigar, fue mas una reflexión somera desde su mirada en torno a la sexualidad con ojos de judío, un poco compleja y enredada.
Pero al margen de esa salvedad, la conformación del consciente, el inconsciente y el subconsciente si tienen mucho que ver con las imágenes emocionales y psicológicas que nos arman la estructura afectiva para querer, ser queridos y relacionarnos mejor en la vida emocional.
4.
Formación del cerebro y sus dinámicas mentales.
Consciente, inconsciente, subconsciente, supra-consciente.
Consciente que es la torre de control de las decisiones, elecciones y escogencias. Se asoma a la realidad a través de los 5 sentidos. Quien experimenta la vida. Maneja el mundo exterior. Acumula las percepciones, los recuerdos, los pensamientos y es PROACTIVO.
Horma el carácter y el temperamento, porque es como la puerta visible de sus comportamientos.
Inconsciente, es toda esa sección que olvida lo vivido, no se acuerda, pero todo está almacenado. Abarca seis de las 7 partes del cerebro. Los años infantiles, el mundo de la noche mientras dormimos está guardado allí. Es como un álbum de fotografías con todo el registro de nuestra vida. Es el campo magnético del “cerebro reptiliano”. Protege y pide protección. La que nos inclina hacia el Placer. Huir del dolor.
Subconsciente, es todo el mundo subterráneo que obedece órdenes y mandatos. Guarda todas las heridas y mensajes desde el nacimiento. Y los combina con las memorias hereditarias y el material genético. Gobierna los sueños cuando dormimos. Es la sede emocional cuando entramos en serenidad. Acude al silencio, la meditación, y la reflexión.
Supra-consciente, es la habitación del Espíritu Santo y el nicho de Dios Padre Creador. La fuerza de todo el mundo simbólico, metafórico, creador de manera comprometida. Es el campo de las enfermedades, adicciones, conductas destructivas. Es la parte que quiere hacer, pero NO PUEDE. Si no está tranquilo es el ring entre los conflictos y la ansiedad.
5.
Síndrome de OTELO.
A raíz de una obra teatral de Shakespeare, brotó una manifestación entre las gentes, por una serie de desórdenes familiares provocado por preguntas, celos, suposiciones, juegos psicológicos, que hacen que haya desconfianzas, dudas y malas interpretaciones entre los componentes de una familia, que desembocan en el síndrome OTELO: dudar de las conductas del otro, estar interrogándolo, acosando con preguntas. Y comentarios descalificadores que, al escucharlos los hijos, siembran ellos las mismas dudas y desconfianzas.
Se crea un mal-ambiente en casa hablando mal del otro (acusado-sospechoso). Otelo termina matando a Desdémona su mujer y luego determina su suicidio. Drama total: ¡todo se acaba ¡
Todos los mecanismos de la LIBIDO, se mueven en el plano de la INCONSCIENCIA, están lejos de vivir en la parte mental del CONSCIENTE. Por eso escapan al control:
Por eso de forma hermosa Paul Ricoeur manifiesta lo siguiente: “Cuando dos seres se abrazan, no saben lo que quieren, no saben lo que buscan, no saben los que hacen y no saben lo que encuentran”. Los sentimientos afectivos, sensoriales, sexuados y genitales son confusos en los seres humanos debido a represiones, carácter expresado o confuso, a los traumas, a los abusos e indelicadezas con la que se trata. A los fantasmas que deambulan, a las ignorancias, a la falta de respeto y las hipersensibilidades. A los trastornos en las relaciones parentales. A desequilibrios en las relaciones que son disfuncionales por el abismo de edades y experiencias. A la inadecuación de roles.
Con estos cuadros mentales funcionamos y transcurre nuestra vida. Es necesario dedicarle tiempo, espacios, afectos, ejercicios para estarlos poniendo en funcionamiento y crecer como personas mentales. Jugar, servir, ayudar, leer, crear, meditar, acompañar, hablar con alegría de la vida, dibujar, compartir, aspirar a una vejez sana, hacer silencio.
Los dolores pasados hay que aceptarlos, asumirlos y superarlos con el presente emocional. Las equivocaciones y errores, reírse de ellos y no manejarlos como disculpa para anclarse en el pasado.
Este nicho uterino y sereno, lo soñamos, ansiamos y deseamos constantemente. Salir de allí, vivir emocionalmente y regresar al final de la vida (estado de cielo. O eternidad, que nunca se acabe, se prolongue en el tiempo).
Junio 1 de 2.018
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