Hacer ejercicios espirituales es una manera de examinar la conciencia, de meditar, de reflexionar un rato sobre la vida y sus energías fundamentales. Asi como pasear, caminar y correr son ejercicios corporales, esculcar mis errores, planificar mi vida, quitar mis gazapos continuos, son otra manera de Revisar mi vida para crecer como persona. Pasar de egoísta a generoso.
Para hacer este Ejercicio, es necesario ponerle toda la alegría, la emoción, la generosidad para que todo salga bien. Ponerle ánimo y entusiasmo al Ejercicio.
Encontrar sentido a la vida: yo soy ante todo un ser buscador de sentido. La vida de por sí, no tiene sentido, yo soy quien encuentra sentido a lo que hago diariamente, si me dejo “rutinizar”, poco a poco me diseco. Número 23 de los E.E.
Número 46, Que todo lo que haga, piense, sienta esté orientado a cumplir la Voluntad de Dios, que todo sirva y colabore para que el Universo que salió de las manos creadoras de Dios, vuelvan a EL, de forma transformada, por mi inteligencia, voluntad y emoción espiritual de colaborar con esas fuerzas amorosas.
Ejercicios número 55. Tener un crecido e intenso dolor porque mis conductas y comportamientos hasta ahora han sido una contravía de la Evolución y una zancadilla constante al Universo que viaja hacia Dios, y yo le hago trampas, me empeño en detenerlo, en atajarlo, en torcerlo. Mi egoísmo, codicia, y capacidad destructora le impiden el camino de la generosidad para que camine hacia Dios.
Dios me llama; que no sea SORDO a su llamamiento, que esté dispuesto y disponible para seguirlo con generosidad, con alegría. Él se fija en mí, y yo me alineo en su equipo, en su grupo. Ejercicios número 91. Estoy bajo su bandera; la del Bien. Juego con su camiseta-equipo.
Dios Padre Creador se inventa esta CREACION tan maravillosa, tan inteligente, tan misteriosa. Y yo aquí en este universo, sensacional haciendo parte de esta orquesta de la vida y pareciera que tengo reclamos, agresividades, violencias, terquedades, llevar la contraria como si con eso quisiera llamar la atención y pelear con Dios.
Dios Hijo Salvador, vino a la historia y se hizo Niño y a mí me parece que tengo otros planes diferentes y no acepto que asi haya sido la realidad. Como que mi plan, es mejor. ¿No es como un orgullo bobo y ridículo? Aceptar que Dios se hizo historia, asi como la mía.
Que Dios Guiador, se hizo Espíritu para soplar en la conciencia y direccionarnos por la vida, como camino. Y yo tengo que direccionar a otros.
Dios me quiere afiliar a su plan, que bueno colaborar con su Proyecto. Para eso son los Ejercicios Espirituales. En eso consiste la primera semana que estamos haciendo. Que yo me decida a vivir en su equipo y trabajar para el Bien y construir la vida en muchos sentidos. Apostarle al Bien, ya no más maldad.
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