Hemos atravesado en este viaje por la vida, tres años tormentosos, llenos de dolor e incertidumbre, atravesados por un virus espantoso que desestabilizó a la humanidad; 2.020, 2021, 2022 han sido de amenaza, mucha enfermedad, muerte, desestabilización de la economía, de la agricultura, la movilidad estuvo detenida, el transporte en el mundo lleno de inconvenientes, obstáculos y parálisis de formas diversas. Las fronteras de los países se tuvieron que cerrar y proteger debido a la amenaza real de un virus aéreo y volátil que inundó al mundo entero, desde una ciudad china que nos contagió a todos.
Podemos decir que estamos en cuarentena, en cuidados intermedios, en un estadio de volver a sentirnos fuertes después de tanta amenaza y fragilidad que padecimos. Nos estamos recuperando de unos años llenos de zozobra.
La economía hay que recuperarla, los sitios de trabajo, la estabilidad emocional, la salud mental agredida, las familias bastante incompletas, los encierros lastimosos que padecimos, la inseguridad que nos acogió, la incertidumbre que nos amenazó por estos años pandémicos. El mundo y la vida después de este sacudón se demorarán en volver a su cauce normal y muchas cosas cambiarán y no serán iguales.
Con esta introducción me gustaría acompañarlos en una reflexión que nos ayude a tomar conciencia de las 7 formas de vivir el ARTE INTEGRAL y descubrir unas opciones de vida en este final de los días que a cada uno les quede, después de la crisis por el virus.
La vida artística posee 7 dimensiones humanas que es necesario descubrirlas, vivirlas, practicarlas, ponerles atención vital.
La música, la literatura, la poesía, el teatro, la pintura, la escultura, y el cine. Cualquiera de estas formas artísticas nos conduce por un campo de humanidad, de sensibilidad, de artisticidad, de elegancia y armonía necesarios para vivir en un mundo penoso pero asombroso.
El arte es una manera de despertar a la elegancia, a la armonía, a la expresión humana que tanto necesitamos.
Recorramos el mapa de las artes, enumerando cada una de estas formas de expresión, que la humanidad ha inventado desde tiempos remotos, para ubicarse en la geografía terrenal no solo con arte sino con humanismo.
LA MUSICA.
Se cree que hace 7.000 años ya sonaban los primeros tambores, conchas y huesos que emitían sonidos musicales y después las primeras citaras y arpas que alegraban las fiestas y las reuniones de las tribus para acompañar la soledad de la noche y los aprendizajes humanos para enseñar y transmitir con la tradición oral, las enseñanzas en los niños.
La historia de la música cobija a todas las regiones de la tierra. El viaje es por China, Mesopotamia, Egipto, Grecia, Turquía, Roma, la parte norte de Europa, España, Portugal etc.
Las corales, las sinfonías, las voces a capella, las grandes orquestas, los cantos flamencos, la aparición de los cantores desprendidos de las bandas musicales. Con el abaratamiento de los instrumentos musicales y el nacimiento de las posibilidades de hacer música de manera mas simple, el mundo se inundó de música por todos los aires y los salones.
Nació el jazz, el rock, la música con letras románticas para expresar el amor en todas las escalas musicales.
Hoy asistimos a la música de carrilera, de planchar, de pop, al tango, el bolero, a la ranchera. Todos los aparatos musicales nos deleitan con diferentes tipos de música acompañada de festivales, concursos y encuentros de bandas innumerables, mas toda la música personal que acompañan las soledades propias y ajenas. “Algo así como que la música rompe el silencio y donde no hay silencio no hay vida”.
Estamos rodeados y acompañados por cantantes de todos los géneros, de todos los estilos, de todas las posibilidades. La música está a la orden para nuestros oídos y la sensibilidad de la piel.
Escuchar música nos libera, canta por otros letras y sentimientos que no alcanzamos a expresar, y otros nos comunican lo incomunicable.
De ahí que oír música es sano, dedíquele tiempo a limpiar por dentro emociones negativas, tristes y prenda el corazón a las perspectivas animadoras, positivas y optimistas de existir.
LITERATURA.
Lea novelas, lea crónicas de vida, lea autobiografías, biografías de seres humanos prodigiosos, lea los circuitos históricos para que conozca el hilo conductor de la humanidad y cómo ha evolucionado.
Leer las sensaciones humanas escritas, es no solo asomarse a la humanidad sino sentir los sentimientos ajenos que usted puede asimilar.
La humanidad ha gastado mucho tiempo y mucho papel en honrar sus sentimientos como para no asimilar algunos de esos pensamientos-sentimientos y superaciones.
La humanidad es todo un caldo de éxitos y frustraciones que de muchas maneras son un leccionario vivo de lo que ha vivido la humanidad y es necesario conocerlos para honrar a los que se atreven a escribir sus emociones, vivencias, pensamientos y maneras de vivir.
POESIA.
Escribir versos, rimar los sentimientos, ponerle música a una letra sentimental, toca el corazón y sensibiliza la piel de los amores.
Desde hace miles de años la humanidad hizo poesía, grabó salmos de alegría, de memorias para recordar los momentos dolorosos y las tragedias sufridas.
La poesía es una manera sublime de elevar el pensamiento al corazón, de la sangre a los sentimientos, de la ruina a la magnificencia.
La poesía es una forma de exaltar los momentos dolorosos a las maneras elegantes de existir. Un forma nueva, simple, memorable, llena de sentido, que ausculta el corazón alegre o el corazón herido… haga poesía, lea poesía, aprenda a declamar y sentir la vida con elegancia, armonía y musicalidad.
TEATRO.
Podemos decir que la vida es actuada, es teatral, que a todos nos gusta el show, el festejo, la diversión grupal.
La vida de muchas maneras es un escenario en el que actuamos todos y al mismo tiempo somos espectadores.
Por ratos nos subimos al escenario y en otros momentos hacemos de espectadores. Actuamos y aplaudimos.
Lea teatro, haga teatro, haga mímica, desfile ante otros, ensaye su papel protagónico y el de acompañante. Aprenda a detectar cuando usted quiere ser actor protagonista y cuando usted es relegado a actor de segunda, invisible y compare sus sentimientos y que percibe por dentro.
PINTURA.
Dibuje la realidad que ve y la que siente. Tome un lienzo o un papel y dibuje la vida. Hacer trazos y colorear es importante, acerca a unas emociones muy vitales.
En las paredes de las cuevas la humanidad comenzó las clases de dibujo y fue capaz de ensayar copiar los trazos de la realidad. Pintó animales, pintó humanos, pintó sus emociones y las dejó depositadas en las paredes de las cavernas para siempre.
Y desde tiempos inmemoriales fue capaz de dibujar algo así como los “primeros grafitis” de su imaginación.
En estos tiempos azarosos post-pandemia haga dibujos, ensaye pintar sus emociones, sus realidades tanto externas como de su interior oscuro y complejo. Gaste un tiempo y un lienzo (hoja de papel) y pinte.
Estudie las diversas escuelas de pintura; la naturaleza abierta, los sitios cerrados, los autorretratos, los bodegones, las pinturas abstractas, los modelos de pintura simple. Los trazos infantiloides, la pintura romántica, expresiva, impresionista, las pinturas que son cercanas a la fotografía.
ESCULTURA.
Haga manualidades, con las manos sea capaz de crear realidades. Dele formas a la vida con su creación.
Tome barro y haga cerámica. Tome papel y haga origami. Tome chatarra y dele formas finas a sus ojos.
CINE.
Vea todas las películas que pueda y resista. El cine le enseña a manejar los roles de los artistas y las emociones que explayan.
Métase en la película, identifíquese con los actores y maneje la emoción de rechazo o afiliación con algunos protagonistas de la película para que sienta la alegría o el rechazo, la identificación o la saturación que le generan.
Ríase o pelee, grite o sienta la emoción que le trasmita cada personaje. Todo esto del cine es una catarsis muy sanadora, revitalizante para mejorar sus emociones y vivir de forma mas sana.
A modo de epilogo, con este recorrido por las 7 clases de artisticidad, cuando estamos saliendo de una etapa bastante dura, difícil y llena de calamidades, es necesario mientras volvemos a la normalidad y se aquietan las aguas del mundo, hacer algún cambio emocional que nos sane por dentro y recupere la calma interior.
Que este caminar por las diferentes formas de expresión nos acompañe por fuera y por dentro para recuperar el dolor que sentimos durante la aparición del COVID 19.
Una manera de REGISTRAR que estamos sanos es inscribirnos en cualquier clase artística que la humanidad ha inventado y practicado. Sea artista de su vida con alguna forma de expresión.
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